Rafael Nadal, el mejor jugador de la historia en tierra batida, se enfrenta al que es posiblemente el mejor tenista de la historia, Roger Federer, en lo que es la reedición de la final de la temporada pasada, donde nuestro campeón perdió de manera sorprendente. Desde entonces no se ven en una pista de teins. Este año toca revancha, y confiamos plenamente en la victoria.
A pesar de que es un dato anecdótico y que lo verdaderamente importante es conseguir la victoria en el Masters de Madrid 2010 y seguir trabajando duro para hacer lo mismo en Roland Garros y Wimbledon, el Ranking ATP se va enderazando y devolviendo a Rafael Nadal al lugar donde debe estar, que es el número uno del mundo. En el día de hoy ha alcazando el número dos, y conseguir una victoria en la final de mañana además de otra en Roland Garros nos situarán en la pole position para volver al sitio de donde jamás se debió salir, ya que nuestro campeón perdió el número uno del mundo sin poder defenderlo, en casa, sin poder jugar. Ahora en la pista, nadie puede frenarle.
Nico Almagro hizo esforzarse a fondo a Nadal, que ha tenido un día duro en el trabajo. La mentalidad positiva, la agresividad en el juego y el prodigioso revés del jugador murciano pusieron contra las cuerdas durante muchos minutos a un Rafa que no podía hacer absolutamente nada para evitarlo. A base de casta y sólo de su mejor tenis pudo darle la vuelta al partido y llevarlo a su terreno. Fue un partido soberbio, un partido del que se aprende, una de esas remontadas que nos deja un gran sabor de boca. El resultado, 4-6, 6-2 y 6-2. Ahora toca darlo mejor en la final contra el suizo.
El mallorquín completó su decimocuarto partido en la presente temporada en tierra batida, con un porcentaje de victorias absoluto. Nadal vuelve a la final del Masters de Madrid y lo hace en mejores condiciones que el año pasado, por lo que podemos ser optimistas. Tanto Nico Almagro como Ernest Gulbis nos han demostrado que pueden hacer sudar y mucho a nuestro campeón, por lo que la final será muy complicada… e histórica. Podemos superar a André Agassi en el récord de Masters 1000.
A pesar de que es un dato anecdótico y que lo verdaderamente importante es conseguir la victoria en el Masters de Madrid 2010 y seguir trabajando duro para hacer lo mismo en Roland Garros y Wimbledon, el Ranking ATP se va enderazando y devolviendo a Rafael Nadal al lugar donde debe estar, que es el número uno del mundo. En el día de hoy ha alcazando el número dos, y conseguir una victoria en la final de mañana además de otra en Roland Garros nos situarán en la pole position para volver al sitio de donde jamás se debió salir, ya que nuestro campeón perdió el número uno del mundo sin poder defenderlo, en casa, sin poder jugar. Ahora en la pista, nadie puede frenarle.
Nico Almagro hizo esforzarse a fondo a Nadal, que ha tenido un día duro en el trabajo. La mentalidad positiva, la agresividad en el juego y el prodigioso revés del jugador murciano pusieron contra las cuerdas durante muchos minutos a un Rafa que no podía hacer absolutamente nada para evitarlo. A base de casta y sólo de su mejor tenis pudo darle la vuelta al partido y llevarlo a su terreno. Fue un partido soberbio, un partido del que se aprende, una de esas remontadas que nos deja un gran sabor de boca. El resultado, 4-6, 6-2 y 6-2. Ahora toca darlo mejor en la final contra el suizo.
El mallorquín completó su decimocuarto partido en la presente temporada en tierra batida, con un porcentaje de victorias absoluto. Nadal vuelve a la final del Masters de Madrid y lo hace en mejores condiciones que el año pasado, por lo que podemos ser optimistas. Tanto Nico Almagro como Ernest Gulbis nos han demostrado que pueden hacer sudar y mucho a nuestro campeón, por lo que la final será muy complicada… e histórica. Podemos superar a André Agassi en el récord de Masters 1000.
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