Cuatro novedades presentaba la alineación del Real Madrid con respecto a la que se pudo ver ante el Racing de Santander. Ramos y Albiol volvían a la defensa, Lass acompañaba a Xabi Alonso en el centro del campo y Raúl ejercía de capitán sobre el césped.El dominio del esférico corría a cargo del conjunto local y las ocasiones también. La primera corrió a cargo de Kaká con un disparo lejano (4’). El primer susto local fue secundado cinco minutos más tarde por otro remate desde fuera del área de Xabi Alonso y una gran individual de Higuaín en la que el balón llegó manso a las manos del portero visitante Leoni.
Dadas las circunstancias del partido se preveía que el gol madridista no tardaría en llegar. Y la realidad que observábamos sobre el césped no tardó en plasmarse en el electrónico. Sólo necesitó veinte minutos Kaká para recuperar el balón, deshacerse de un defensa y asistir magistralmente a Higuaín. El argentino puso la guinda a la gran jugada de su compañero engañando a Leoni en el mano a mano con su pierna menos buena.
El gol dio tranquilidad a los blancos, pero los madridistas no se conformaban -su rival sólo inquietaba a Casillas con disparos lejanos-. No en vano, Xabi Alonso lo intentaba de nuevo pese a que el cancerbero visitante lo evitase con una fenomenal intervención (26’). Buena prueba de que los locales no cejaban en su empeño de marcar el tanto de la tranquilidad fue el disparo de Marcelo al poste tras una vistosa jugada ensayada. Higuaín saca un corner desde la derecha y el brasileño remata de volea desde la frontal (34’). Leoni era un espectador de excepción de la jugada mientras resoplaba aliviado al no ver el balón en la red.
VUELVE RONALDO Y ASISTE AL LIDERATO DE SU EQUIPO
La segunda mitad fue un calco de la primera. Las ocasiones corrían a cargo de los locales mientras que los suizos buscaban hacer daño con rápidos contragolpes en los que, a lo sumo, conseguían infructuosas faltas lejanas. Van der Vaart sustituía a Arbeloa –Marcelo ocuparía el lateral izquierdo- y una preciosa volea del holandés pudo llevar el segundo gol al marcador (65’) minutos antes del esperado regreso.El Santiago Bernabéu rompía en vítores y aplausos en el momento en el que Cristiano Ronaldo volvía a saltar al césped tras caer lesionado ante el Marsella en este mismo escenario (69’). El portugués, incluso, levantó de sus asientos al público congregado al evento con una gran cabalgada en la que rozó el gol (90’). La segunda mitad no dio para más y los madridistas obtuvieron una cómoda victoria que les otorga el liderato del grupo y prácticamente la clasificación para octavos de final –tendrían que perder en Marsella de forma abultada (4-0)-. El Real Madrid mira desde lo más alto tanto en España como en Europa.
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